Salida en avión con destino Lisboa. Llegada y traslado al hotel. Cena y alojamiento.

Desayuno. Comenzaremos el día realizando una visita panorámica de Lisboa para descubrir la capital costera de Portugal, recorreremos sus calles y nos acercaremos hasta el Barrio de Belém, donde descubriremos su famosa Torre de Belém, el Monumento a los descubrimientos y la maravilla arquitectónica del Monasterio de los Jerónimos. Almuerzo. Por la tarde, realizaremos una visita con guía local del casco antiguo de Lisboa recorriendo sus principales calles con edificios de colores pastel. La ciudad ha conservado su carácter auténtico a lo largo de los siglos, sus estrechas callejuelas serpentean entre casas tradicionales revestidas de azulejos, donde los residentes cuelgan la ropa en las ventanas y las buganvillas florecen en los balcones. Es un lugar que emana encanto y autenticidad, donde se puede apreciar la esencia de la vida lisboeta. Regreso al hotel. Alojamiento.

Desayuno. Salida hacia la villa portuguesa de Sintra declarada Patrimonio de la humanidad por la UNESCO, para realizar una visita panorámica con guía local. El símbolo de esta villa de cuento, es el Palacio Da Pena que se encuentra situado en lo alto de un escarpado saliente rocoso. Almuerzo. Por la tarde, salida hacia los encantadores pueblos marineros de Cascáis y Estoril. Durante el trayecto realizaremos una breve parada para observar el Paraje natural de Boca do Inferno, una formación rocosa de acantilados en cuyas cavidades rompen las olas del Océano Atlántico provocando el sonido que da nombre a este rincón natural. Regreso al hotel. Alojamiento.

Desayuno. Salida hacia la villa portuguesa de Sintra declarada Patrimonio de la humanidad por la UNESCO, para realizar una visita panorámica con guía local. El símbolo de esta villa de cuento, es el Palacio Da Pena que se encuentra situado en lo alto de un escarpado saliente rocoso. Almuerzo. Por la tarde, salida hacia los encantadores pueblos marineros de Cascáis y Estoril. Durante el trayecto realizaremos una breve parada para observar el Paraje natural de Boca do Inferno, una formación rocosa de acantilados en cuyas cavidades rompen las olas del Oceano Atlántico provocando el sonido que da nombre a este rincón natural. Regreso al hotel. Alojamiento.